Lo que llamamos teatro alcanzó en el Imperio Incaico un alto nivel de desarrollo. Junto con el famoso ''Ollantay'', esta obra es de lo poco que pudo rescatarse del género dramático nativo tras la destrucción por parte de los españoles. Escrita en un quechua limpio, sin impostaciones y en verso, posee ricos recursos narrativos y nos entrega la visión de los vencidos. La temática es eminentemente histórica, trata de la vida de los monarcas y grandes personajes y roza la tragedia. Esta edición entrega la versión en quechua y en español, ilustrada, además, con iconografía de esa cultura.