Casada con apenas dieciséis años con su amigo y vecino de diecinueve, el conde de Maybury, Georgia siempre ha sido fiel a su marido, aunque jamás dejó de coquetear con otros hombres y actuar de una manera que, para las rígidas convenciones de la época, podía parecer demasiado atrevida. Cuando el conde muere en un duelo, arrecian los rumores de infidelidad y engaño. La joven viuda debe ocultarse en casa de sus padres para superar el dolor por la muerte de su marido y para protegerse de las maledicencias. Pero no contaba con que aparecería lord Dracy, un noble arruinado pero increíblemente atractivo. Y mucho menos que el propio padre de Georgia la ofrecería en matrimonio a Dracy para pagar una deuda de juego. Mientras ella trata de recobrar su reputación y Dracy intenta desvelar el complot que se oculta tras los malintencionados rumores, surge entre ambos una atracción que puede poner en peligro todo aquello por lo que luchan.