La Revolución Industrial ha constituido el principal acontecimiento de la historia moderna de las sociedades occidentales capitalistas y, especialmente, de las europeas. Uno de los temas más controvertidos entre los historiadores económicos y sociales ha sido, y todavía es, el de los posibles costes sociales que dicha revolución conllevó. De ellos el más relevante es seguramente las posibles penurias y dificultades económicas padecidas `por los obreros de las incipientes fábricas, cuyo trabajo hizo posible en definitiva el triunfo del nuevo orden industrial. Es en este contexto en el que surge el debate en torno al nivel de vida en la Gran Bretaña de la segunda mitad del siglo XVIII y primera mitad del XIX, país y período más representativos de la Revolución Industrial.