Después de componer sus tratados sobre física general y teoría de los cielos, y antes de entregarse a las investigaciones sobre los animales, Aristóteles abordó los fenómenos terrestres que se producen desde la alta atmósfera hasta las entrañas de la tierra. Los meteorológicos fue el tratado sobre física terrestre más leído y comentado hasta el siglo xvii. Es impresionante la variedad de fenómenos estudiados que incluyen no sólo lo que hoy consideramos meteorología, vientos, precipitaciones, tormentas, sino también la hidrología, corrientes marinas, ríos y fuentes, así como la formación de minerales y metales en las entrañas de la tierra. La explicación de todos estos fenómenos cíclicos de la naturaleza se realiza mediante las exhalaciones seca y húmeda que producen la transición entre los cuatro elementos clásicos. Así Los meteorológicos no sólo contiene una enorme riqueza de informes y datos empíricos, sino que constituye un verdadero tratado teórico que da cuenta unitariamente de todos ellos.