Alison, una chica joven, con un trabajo estable y una vida sencilla, se encuentra, de un día para otro, con la peor noticia que le podrían dar: se está muriendo. A partir de entonces, decide hacer todo lo que siempre quiso hacer antes de que sea demasiado tarde. Contrata a un gigoló, Marc, segura de que con un profesional podrá disfrutar de todas las experiencias sexuales habidas y por haber, además de asegurarse de que los sentimientos no serán un problema. Lo malo es que el corazón no entiende de situaciones complicadas y termina haciendo acto de presencia por parte de ambos. Los dos se gustan, se atraen, todo es perfecto. Hasta que llega el día en que todo se descubre, y aquello que fue en un principio de color rosa, se vuelve negro.