Este es un retrato de los vicios de Europa, de estados con administraciones mastodónticas que ejercen un control absoluto sobre el individuo. Es un alegato en contra del poder establecido, de funcionarios con cargos a perpetuidad, de políticos mediocres con poco o nada que aportar. Es una denuncia en toda regla, pero es sobretodo un libro que quiere apelar a la conciencia del ciudadano y de las empresas para que sean más exigentes consigo mismas.