Los naufragios, su recuperación y todo cuanto se refiere a los mismos, están de moda. Acontecimientos recientes nos han devuelto una realidad compleja que, desde el punto de vista jurídico, alcanza complicaciones irresolubles. En su derredor se han articulado leyes internacionales, nacionales, autonómicas todo un conglomerado legislativo, a veces imposible de complementarse, porque los intereses suscitados son muchos y muy variados. En este libro se aborda el problema desde diversos ángulos. En un recorrido sucinto a través de una realidad tan plural como la que se refiere a los pecios, se van poniendo de manifiesto desde los naufragios más significativos (por su interés jurídico, histórico, humano), hasta los intereses más enconados. El libro, es evidente, no puede ofrecer soluciones; porque tampoco existe un ánimo decidido en solucionar, de una u otra manera, algo que atañe a la propia Historia, y a una cultura que puede hallarse repartida entre diversos países. Pero sí tiene un especial interés para quien quiera acercarse a sus páginas, y contemplar esos diversos puntos de mira que, en ocasiones, cegados por el brillo del oro, no dejan de ofrecer unas soluciones interesadas, que tampoco pueden desatenderse. . Quizá lo único que pueda constatarse es que la categoría de tesoro está ya siendo desterrada por la idea del "bien de interés cultural"; que, sin embargo, tampoco tiene fácil encaje en esa dinámica que se genera entre lo que serían los "bienes patrimoniales" de una nación en cuyas aguas territoriales se hallara un naufragio, los llamados "barcos de Estado" o el criterio emergente del que ha dado en denominarse "vínculo verificable".