Esta guía de viajeros surge en respuesta a otras obras del mismo tipo que fueron surgiendo a lo largo del siglo XIX y que, según dice el autor, solían componerse de datos inexactos o erróneos. Estas obras solían venderse como paseos históricos-artísticos, o como guías de forasteros, que solían publicarse una vez al año, actualizando los datos que hubieran cambiado. En el caso de la obra escrita por Adolfo de Castro, contiene una amplia lista de edificios y monumentos emblemáticos de la ciudad, con someras descripciones de los mismos y donde se cuentan anécdotas y costumbres al hilo de cada uno de ellos. Se puede considerar un buen paseo por la historia y las costumbres de la ciudad gaditana.