Las profundas cicatrices que han marcado a fuego a sir Alistair le recuerdan a diario la traumática experiencia de su paso por las colonias. Refugiado en su casa, con un solo sirviente, pretende evitar todo contacto con el exterior y esconder su aterrador aspecto. Pero cuando una bella mujer dispuesta a ser su ama de llaves llega a su puerta, algo se despierta en su corazón, algo que conecta con la pasión vital que ha reprimido durante tanto tiempo. Helen Fitzwilliam ha decidido huir del lado de su amante de una vez por todas. Han sido demasiados años pagando por un error que cometió siendo muy joven. Dejar el lujo al que está acostumbrada por un desvencijado castillo escocés será el menor de los riesgos; el hombre que lo habita podría espantar a cualquier mujer menos decidida que ella. Y sin embargo, quizá Helen sea la única capaz de ver más allá de las huellas físicas y emocionales de su nuevo amo.