Por esta obra de Gonzalo Celorio desfilan grandes nombres que han quebrantado los cánones literarios -Gabriel García Márquez, Julio Cortázar, Carlos Fuentes-, pero también las remembranzas personales que describen cómo su autor inició ese gusto por los libros y la lectura que, a la larga, se volvió un vicio más que una virtud.En estas páginas Celorio nos deleita con hallazgos que van desde la lúdica revisión de sus cinco obras fundamentales o la reconstrucción del Cortazar lector, hasta el pormenorizado análisis de la contribución de los exiliados españoles a la cultura de México, la de Alejo Carpentier a la novela latinoamericana y la de Villaurrutia al canon de la poesía mexicana.