La «ascensión pacífica» de China marca la nueva agenda de su política exterior y consiste en un paso adelante del principio de la «coexistencia pacífica» elaborado en el contexto de la guerra fría. Los objetivos básicos perseguidos por la diplomacia china son independencia, seguridad y desarrollo. Además, su puesta en escena internacional está determinada por factores como la satisfacción de las necesidades internas derivadas del proceso de modernización; la articulación de su emergencia como nueva potencia; un discurso político de corte nacionalista; una visión del mundo deudora de la lucha contra el hegemonismo; y su actual y firme apuesta por el multilateralismo. Los trabajos aquí presentados nos ofrecen una perspectiva muy completa de las características, argumentaciones y problemas que afectan a la política exterior china, siempre en su contexto histórico y analizando la evolución, e incluso las orientaciones futuras. Se aborda la relación con sus vecinos más próximos, Japón y Rusia, así como con Estados Unidos, la Unión Europea, América Latina, África y otros países de Asia. Además varias contribuciones se centran en aspectos económicos clave de las relaciones internacionales y otras aportan interesantes desarrollos teóricos. Esta obra pionera rompe barreras al reunir a especialistas procedentes de China, México, Argentina, Portugal y España en una apuesta decidida por potenciar la sinología latina en ambas orillas del Atlántico que esperamos continúe dando sus frutos.