Durante el festival Internacional de Fotografía Valparaíso 2013, los fotógrafos Carlos Rivera Segovia y Pablo Ortiz Monasterio se conocieron en un taller sobre foto libros, donde analizaron y discutieron libros fotográficos con la intención de desentrañar qué cualidades poseen algunos que los convierten en clásicos. Hacia el final del evento, contagiados por el entusiasmo colectivo, decidieron formar un pequeño y efímero colectivo para desarrollar un libro a partir de las fotografías tomadas por ambos en el emblemático puerto chileno. El trabajo en blanco y negro es parte de una obra de mayor aliento que Rivera comenzó a desarrollar en los años 70. El color, en cambio, es el resultado de dos viajes fugaces que Monasterio realizó recientemente.