El Señor Cric-Crac se parece al gigante egoísta, pero su historia es distinta, porque éste tiene la suerte de conocer a una mujer que le ablanda el corazón. Y es que el amor es capaz de transformar a un malvado en un hombre dulce y comprensivo. Las ilustraciones de este álbum muestran un fantástico lugar plagado de seres extraños, muy adecuadas para un texto irónico que se dirige a lectores experimentados.