Helios Gómez (Sevilla, 1905-Barcelona, 1956) pertenece a la generación de entre-guerras que hicieron de las causas político-sociales el tema principal de su producción. Conocido fundamentalmente por sus trabajos en el campo del diseño, de la publicidad, cabeceras de diarios, carteles militantes e ilustraciones en tinta china publicadas en la prensa y editadas en los álbumes Días de Ira (Berlín 1930), Revolución Española (URSS 1933) y Viva Octubre (Bruselas 1936), destacó también en la pintura mural y otras técnicas como la pintura al óleo, el dibujo, las acuarelas, etc. En su vida, militancia política y obra se entrelazan a lo largo de los años. Entre 1927 y 1930 abandona España por razones políticas, exiliándose primero en París, después en Bruselas donde trabaja como decorador e ilustrador y viajando también por Ámsterdam, Viena y la URSS. En 1929, se instala en Berlín donde expone y colabora con algunas publicaciones. Después del derrocamiento de la dictadura de Primo de Rivera (1930) se instala en Barcelona, donde colabora en numerosas revistes republicanas y comunistas como lOpinió, La Rambla, La Batalla, LHora, Bolívar, Nueva España, Mundo Obrero y El Mono Azul. En 1931, ingresa en el PCE colaborando como ilustrador para Mundo Obrero. Encarcelado en 1932 consigue la libertad provisional escapando a Bruselas y después a la URSS invitado como representante español en el Congreso Internacional de Artistas Proletarios. Reside en el país hasta febrero de 1934. Vuelve a Barcelona participando en los fets doctubre siendo nuevamente encarcelado. Una vez liberado, regresa a Bruselas. En abril de 1936 participa en la creación del Sindicat de Dibuixants Professionals de Catalunya impulsor del cartelismo militante durante la Guerra Civil española; en julio de este mismo año lo hará en la defensa de Barcelona luchando en las barricadas. Perdida la guerra, se refugia en Francia donde es internado en los campos de concentración franceses (1939-1942). Vuelve a Barcelona siendo arrestado entre 1945-46 y 1948-54 encarcelado en la Modelo de Barcelona, donde pinta un oratorio conocido como La Capilla Gitana y compone un corpus poético. Morirá dos años después de salir de la prisión.