En este magnífico estudio se aborda la figura institucional del virreinato como forma de gobierno. Mediante un desarrollo cronológico se sigue la evolución de un sistema creado bajo el reinado de Carlos I y adaptado al gobierno de América al trasformar las colonias en reinos de Indias. Desde ese momento, la Monarquía Hispánica viviría bajo una doble tensión o contradicción, marcada por la aspiración a la unidad y la centralidad al tiempo que su legitimidad descansaba sobre su carácter compuesto y desconcentrado.