Crónica de la nada hecha pedazos es un texto marcado por la controversia. Aplaudido por un sector de la crítica y muy cuestionado por otro, la opera prima de Juan Cruz Ruiz es la memoria de un momento histórico convulso, narrada a través de la propia convulsión personal del joven escritor. Pero esta obra no sólo es la primera novela de un adolescente; es la novela de un joven afín a la ideología comunista que rompía con las estructuras y con los géneros literarios cuando la represión franquista daba sus últimos coletazos. Esta obra experimental, digna de situarse a la altura de sus padres intelectuales (Guillermo Cabrera Infante, entre otros), lógicamente alimentó desde su primera edición, por su osadía, las críticas más despiadadas. Sin embargo, permitió también a Juan Cruz tomar el necesario aliento para seguir escribiendo, para consagrarse como uno de los mejores escritores de la actual literatura española. Escrito cada noche al regreso de la redacción del diario en el que trabajaba, tras pasar por el cabaret, Crónica de la nada es, sobre todo, un manifiesto íntimo sobre la libertad. Enlace al blog de Juan Cruz en El País: Mira que te lo tengo dicho.