Un ángel, ligeramente estrábico, es enviado a la tierra para redactar un informe sobre los seres huma-nos. Animal bípedo, autoconsciente, versátil, neuró-tico. Un ser muy complicado, el hombre. La complicación afecta a todas sus funciones. Piensa y ama y sufre complicadamente. Es un ciempiés con juanetes. Inventó el pleonasmo, la carrera de obstáculos, los botones de la bocamanga y las objeciones filosó-ficas a los sistemas filosóficos. Pero al autor del in-forme le ha impresionado especialmente la relación tan complicada que los humanos tienen con Dios. Algunos prefieren caminar hacia la vida eterna andando sobre zancos. Otros se esfuerzan en cons-truir una altísima escalera para llegar hasta Dios mientras éste, a su lado, pacientemente les va su-ministrando yeso y ladrillos. Son complicados en su orgullo, pero no menos en su humildad. ¿Y el famo-so progreso humano a través de los siglos? A de animal, B de Boston. Hoy como ayer, en vez de acercar el taburete al piano, siguen empeñados en arrastrar el piano hasta dónde está el taburete.