Fue Aulo Persio Flaco (34-62 d. C.) un autor meticuloso en la escritura y poco prolífico, del que sólo nos han llegado sus seis Sátiras, publicadas de forma póstuma. De familia acomodada, su esmerada formación en gramática y retórica fue acompañada de una educación bajo la tutela de maestros estoicos. Seguir los pasos de esta escuela filosófica llevó a Persio a oponerse al emperador Nerón y a las personas consagradas a costumbres frívolas y superficiales, como demuestra en sus Sátiras. La frialdad analítica con la que Persio examina en sus escritos los degradados caracteres humanos de su entorno busca elevar la verdad sobre la falsedad social y da una mayor agudeza a sus implacables críticas. Persio no busca la sencillez en su obra, sino ir más allá en el uso del lenguaje, utilizando giros atípicos e ingeniosos, aunque nada gratuitos, puesto que siempre busca una austeridad que le ayude a potenciar mejor sus ideas estoicas. Un autor profundamente moral, que fustiga sin piedad los vicios sociales y la decadencia en terrenos tan diversos como el arte, la religión o la educación.