El libro recoge ocho historias de violencia escritas con la sangre de sus personajes. En el imaginario de José de la Cuadra, la realidad atropella la inocencia de los niños, los hombres disparan contra los intentos de rebeldía de las mujeres, la injusticia niega a los débiles el privilegio de la humanidad. Este es el legado brutal de uno de los padres escondidos de la más grande literatura hispanoamericana. Hoy duele como entonces.