Las primeras décadas del siglo XX fueron el escenario de cambios revolucionarios en la física. Los pilares sobre los cuales se asentaba dicha disciplina, que con tanto éxito se había venido construyendo en el siglo XIX, identificables como los paradigmas mecánico, electromagnético y termodinámico, se vieron en una encrucijada ante la presencia de nuevos fenómenos que no podían ser explicados dentro de esos marcos conceptuales. La presente obra aporta elementos de comprensión de esos momentos de crisis de la física bajo dos perspectivas: la vida y la obra de Paul Ehrenfest, y un análisis multidimensional en la caracterización de dicha disciplina. Acercarse a un personaje multifacético como Paul Ehrenfest (1880-1933), que no aparece de manera relumbrante en otras historias de la física, ofrece aproximaciones interesantes al tema en cuestión. Paul Ehrenfest fue un científico localizado en el foco de poderosas tensiones que dieron lugar al surgimiento de la física moderna, por lo que es probablemente la mejor personificación del drama que tuvo lugar en esa disciplina a principios del siglo XX. Con él, nos topamos con un personaje singular, un gran maestro, un crítico de su disciplina y sobre todo de sí mismo y cuya vida estuvo inextricablemente ligada a los temas cruciales de la física de principios del siglo XX. La narración que encontramos en este libro destaca por caracterizar a la física más allá de sus dimensiones empírica y lógico-formal, reconociendo sus elementos imaginativos y creativos y sus múltiples interacciones con el entorno filosófico, social y cultural que la convierten en verdadera aventura intelectual, pero también en verdadera fuerza civilizadora. La obra que el lector tiene en sus manos contribuye a construir puentes entre las ciencias y las humanidades, discurriendo a través de líneas divisorias o fronterizas que la hacen una fuente rica de conexiones entre diferentes formas de pensamiento, de comprensión y de búsqueda de significados.