El año 2008 aparece, en España, con signo propio: se celebra el bicentenario de la Guerra de la Independencia. Numerosos libros y diversas manifestaciones científicas verán la luz a lo largo de este año para conmemorar el acontecimiento. El objetivo del libro que el lector tiene entre las manos es bastante distinto: presenta la Guerra de la Independencia a través de la huella que esta guerra dejó en la literatura francesa del siglo XIX. ¿Cómo los franceses vieron a los españoles? Sin pretender descubrirnos únicamente en el espejo del otro (aquí, el enemigo), sí es cierto, sin embargo, que el otro nos ayuda a conocernos mejor. Leer a Balzac, Stendhal, Hugo... descubre que, más allá de los tópicos, los grandes escritores comprendieron la injusticia de Napoleón al iniciar esa guerra, pero también vislumbraron el escaso valor político de los Borbones, en cambio admiraron la energía y valor de todo un pueblo. Hay un deseo de comprender al otro: mezcla de admiración y de horror ante una manera de ser distinta.