Esta historia de Egipto, desde la conquista árabe en el año 639 hasta hoy, ayuda al lector a comprender la paradoja central de la identidad egipcia: la separación de los egipcios de sus gobernantes, que hasta 1952 eran extranjeros, y la identificación de esta identidad con una porción de tierra encerrada en unos límites perfectamente fijados desde hace milenios. La primera parte del libro, los tres primeros capítulos, hablan de la conquista árabe, la época de los mamelucos y la incorporación de Egipto al Imperio otomano; la segunda analiza el primer desarrollo del Estado moderno bajo el mandato de Muhammad Ali, el experimento liberal que se produjo después de 1922, la época de Nasser y el legado que éste dejó a sus sucesores, Sadat y Mubarak. Durante la era de Mubarak, los egipcios han sido testigos de importantes cambios con la llegada de la globalización y los efectos que tiene en su economía, la aparición de nuevos partidos políticos, el auge del fundamentalismo islámico y los consecuentes cambios de actitud en las mujeres. La autora explora todos estos avances y lo que han significado para el pueblo egipcio. Esta breve historia es perfecta tanto para los estudiantes como para los viajeros que visitan esta región por primera vez.