El famoso historiador Paul Preston afirma que este libro es uno de los diez más importantes entre los miles que se han escrito sobre la guerra civil de 1936-1939. Steer se encontraba en el País Vasco como corresponsal de The Times cuando ocurrió el bombardeo de Gernika. Su reportaje supuso la primera denuncia internacional del ataque alemán. Más que ningún otro comentarista de la época, Steer «consiguió plasmar en su crónica un fuerte sentimiento, no solo de la magnitud de la atrocidad, sino de la amenaza de esta nueva estrategia bélica».