“Kômyô, Clara Luz”, es uno de los capítulos más desconocidos del “Shôbôgenzô, La Preciosa Visión del Dharma Verdadero”, la obra magna del maestro zen japonés Eihei Dôgen. La enseñanza contenida en él fue impartida por Dôgen a la pequeña comunidad monástica del templo Kosho Horin-ji, fundado por él en Uji, Kyôto, en 1233 antes de que se trasladara a la provincia de Echizen, actual Fukui, para fundar Eiheiji. Esta enseñanza fue transmitida a los monjes el 2 de junio de 1243, durante el retiro intensivo de verano, “un día en el que la lluvia caía suavemente de los aleros del templo”, como escribe el mismo Dôgen al final del texto. El término Kômyô está formado por dos kanjis: el kanji kô se traduce como “luz”; el kanji myô como “clara o maravillosa”. “Clara Luz” se refiere a la experiencia de la iluminación o despertar en el que la verdadera naturaleza de todo lo existente se manifiesta en su claridad esencial. La traducción y los comentarios del maestro zen Dokushô Villalba recuperan este texto tan desconocido, haciéndolo accesible al lector contemporáneo.