Este libro pretende dar respuesta a las múltiples preguntas que, ante la llegada de alumnado de otras etnias y culturas a las aulas, formulan los profesionales de la educación. Está dividido en cuatro partes. La primera analiza una investigación etnohistórica llevado a cabo en el sur del estado de Texas que, además de mostrarnos el proceso metodológico nos ayuda a reflexionar sobre la inmigración en diferentes momentos históricos. En esta parte también se recoge un capítulo referido a la ciudadanía paritaria, tema de gran interés porque a la condición de inmigrante, que ya supone una dificultad, se le añade la de ser mujer. La segunda parte ofrece dos capítulos que tratan sobre la comunicación intercultural. La tercera presenta posibles formas de resolución de conflictos y presta especial atención a la mediación intercultural y a su planificación. En la última parte del libro, se exponen programas, recomendaciones, actividades y talleres que sugiere al lector cómo llevar a la práctica todos los planteamientos y reflexiones contempladas en las tres primeras. La utilidad de esta obra viene marcada por el creciente interés y por la sensibilidad que ha despertado el tema entre todos aquellos profesionales que realizan su trabajo educativo en contextos multiculturales. Por ello, es una obra recomendad para todas las personas interesadas en la Educación Intercultural.