«Los trabajos de Cervantes» alude, desde luego, al periplo y penalidades de los protagonistas de su última novela, pero también a las adversidades del oficio de escritor y, en general, a los avatares de la circunstancia vital. Se quería poner, sino fin, sí cerrar el ciclo de conmemoraciones y aniversarios cervantinos del siglo XVI, que arrancó con el aniversario de la publicación del primer Quijote de 2005 y siguieron con las del resto de sus obras, excepto la Galatea. Este libro es la consecuencia del coloquio internacional que contó con la presencia de cerca de medio centenar de congresistas, procedentes de todo el mundo (Argentina, Brasil, China, Francia, Italia, Estados Unidos, Méjico o Portugal), que debatieron sobre el legado de Cervantes y su obra.