Hay personas que han dejado en la historia un rastro imperecedero de bondad y, aunque hayan pasado siglos, siguen cautivando nuestra atención y admiración. Una de estas es santa Isabel, princesa de Hungría y gran condesa de Turingia (1207-1231). El objetivo de la presente obra quiere ser, estimular un encuentro con esta mujer fascinante y dejarnos iluminar por su personalidad y espiritualidad. Isabel es la mujer de las renuncias; renuncia a su vida privilegiada, a todos su bienes, a su buen nombre y a sí misma para emprender la gran aventura de seguir a Jesús pobre, dándose a los indigentes; todo al estilo de Francisco de Asís.