Es difícil encontrar un curso o un máster en el que se enseñe a los abogados cómo deben actuar en las intervenciones orales -audiencia previa, juicio del ordinario y las vistas del verbal- y sin embargo es obvio que resulta conveniente e incluso necesario instruir a aquéllos sobre la mejor forma de llevarlas a cabo. Este manual pretende, de una manera comprensible, clara y concisa, proporcionar a los abogados las pautas necesarias para desenvolverse con éxito en sala. Para ello, su autora huye a propósito de ese lenguaje complicado que pretende ser, en ocasiones, elevado, encerrando muchas veces en su “elevación” una falta de contenido y de ideas. Después de la promulgación de la Ley procesal del año 2000 las actuaciones más trascendentales de todos los procedimientos van a tener lugar “en sala”, por lo que el abogado debe mostrar in situ, en ese escenario, un completo dominio de las actuaciones orales. Entre otras destrezas, la primera es que sea capaz de reaccionar con rapidez: conocer cuándo y cómo puede recurrir una decisión judicial -es sabido que se puede perder un pleito por no haber interpuesto en tiempo y forma el pertinente recurso de reposición-; cómo desarrollar la fase de conclusiones del juicio ordinario de una forma clara, bien armada jurídicamente y, además, breve -el tribunal se lo agradecerá-; cuándo, cómo y qué pruebas debe solicitar y el modo en que éstas deben practicarse; cómo rebatir la prueba del contrario, etc. Por todo ello este libro va a ser de gran ayuda para que los abogados puedan celebrar las audiencias de forma digna, sensata, congruente y fundamentada jurídicamente, pues contiene los esquemas estratégicos en los que apoyarse tanto en las audiencias previas como en el posterior juicio ordinario o en el verbal.