La Segunda Guerra Púnica (218-201 a.n.e.) puede ser considerada como un punto de inflexión en la historia del Mediterráneo Antiguo y la península ibérica fue protagonista de uno de sus principales escenarios de combate. Su desenlace supuso el establecimiento de las bases para el posterior desarrollo del Imperio Romano. Este libro recoge las últimas aportaciones científicas al análisis de la Guerra de Aníbal y en particular los resultados del Proyecto Baecula, el cual puede considerarse como un paradigma para la investigación de campos de batalla antiguos.