En el siglo XVII, el Mediterráneo era un lugar donde aventureros sin escrúpulos campaban a sus anchas; pero también era la frontera entre dos mundos enfrentados: Europa y el Imperio turco. El capitán español Álvaro de Santaella se implica en una peligrosa peripecia. Además, descubrirá que la magia puede ser una fuerza efectiva y terrible.