Son jóvenes, son músicas, son hermosas y son huérfanas. Si desaparecen, nadie preguntará por ellas. O quizá sí. Una mujer independiente y decidida, con la ayuda de un oficial del ejército español, investiga unos asesinatos en serie en la Venecia del siglo XVIII. Venecia, 1716. Caterina Sforza, aprendiz de forense e hija del médico más prestigioso de la ciudad, descubre el cuerpo de una muchacha crucificado en una góndola; está rodeado de velas encendidas y tiene los pechos teñidos de azul. Este será el primero de una serie de asesinatos con puestas en escena tan bellas como perturbadoras. Las víctimas son alumnas del Ospedale della Pietà, el conservatorio para huérfanas con talento musical donde da clase el gran maestro Antonio Vivaldi. Caterina entrará en ese hospicio para descubrir al culpable. No estará sola: el capitán español Alfonso Guardi, conocido en la Corte por sus dotes deductivas y su capacidad de análisis, la ayudará a averiguar qué se esconde tras las muertes en una ciudad fantasma donde nada ni nadie es lo que parece. «Una de vosotras hará algo intrascendente que la bestia interpretará como una señal del destino. La atrapará con sus ardides, la llevará a su sala de tortura y entonces ya no habrá escapatoria...».