La república de los sueños es la República de Brasil, el lugar donde todas las esperanzas humanas pueden hallar cumplimiento. Madruga y Venancio nacieron con el siglo. Se conocieron en el barco inglés que los trasladó de Vigo a Río de Janeiro en el lejano año de 1913. Apenas eran unos muchachos cuando dejaron atrás la miseria y el desamparo de su Galicia natal, para navegar detrás de un sueño, rumbo a los paraísos de ultramar. Madruga conquistará Brasil, levantando industrias, comercios, haciendas. Pero se extraviará en el camino. Venancio, en cambio, mantendrá intacta su condición de soñador: será él quien llore en nombre de Madruga, será el verdadero depositario de sus sentimientos vetados. En La república de los sueños, hecha de emociones, de palabras esenciales, Nélida Piñon sacude al lector y le transmite el sabor agridulce, de triunfo y frustración, de uno de los pocos países del mundo en que sobrevive la epopeya.