"Lo que me llevó a dedicarme a este proyecto escribe el recopilador del libro, C. P. Otero, en el prólogo fue una constante convicción personal: la convicción de que uno de los grandes defectos de la izquierda libertaria es la transmisión defectuosa de la cultura libertaria, un rico acervo que, en gran medida, todavía tenemos que aprovechar. En particular, la obra de Chomsky, (posiblemente) el punto culminante de la tradición socialista libertaria, no parece haber recibido la atención que merece".