La actualidad de numerosos casos de corrupción política, que asolan nuestro país, ha puesto de nuevo el punto de mira en el Código Penal. Entre los delitos para la lucha contra esta corrupción destaca el delito de tráfico de influencias, con escasa recepción jurisprudencial, tanto porque han sido escasas las sentencias dictadas sobre este delito por la Sala 2.ª del Tribunal Supremo, como por el progresivo vaciamiento que se va produciendo del mismo en su aplicación práctica. Lo que sorprende, a pesar de sus limitaciones expuestas por la doctrina, al ser uno de los delitos mejor concebidos desde 1995 para atajar la corrupción política, ya que ataca directamente el «caldo de cultivo» de la corrupción y puede considerarse un delito «madre» de los delitos de corrupción, en un país como España, que es un país «de amigos» y corruptelas. En la presente obra encontrará el lector, dentro del marco jurídico internacional y nacional en la lucha contra la corrupción política, una visión jurisprudencial crítica más que un estudio doctrinal sobre el delito de tráfico de influencias, en la que se recoge por un fiscal del mismo Tribunal Supremo toda la jurisprudencia de la Sala 2.ª dictada desde 1994 hasta nuestros días. A la vista de este trabajo, dado que, sobre todo con la última jurisprudencia, este delito ha pasado prácticamente a dejar de ser operativo como uno de los instrumentos legislativos más importantes en la lucha contra la corrupción política en España, se impone reflexionar sobre la urgente necesidad de bien un cambio legislativo, bien una reorientación jurisprudencial del mismo, más acorde con la hermenéutica que se ofrece desde la crítica, basada en la normativa internacional, a esa jurisprudencia.