El poeta Eduardo Moga nos regala una nueva y excelente edición bilingüe del Llibre d’amic e amat luliano, a la que acompaña un impecable prólogo del traductor, en el que nos introduce en el mundo poético y místico que rodea la obra, vinculada, como es sabido, con la novela Blaquerna, de la que forma parte. Luis Alberto de Cuenca Con el Llibre d’amic e amat, Ramon Llull –Raimundo Lulio, en la tradición castellana– no quiso escribir un libro de poesía, sino un opúsculo didáctico, apto para la edificación de los dedicados a la vida contemplativa. Y, si no estuviera inserto en una novela, el Llibre d’Evast e Blaquerna, se podría sostener que Llull ni siquiera quiso hacer literatura. (...) Blaquerna escribe el Llibre d’amic e amat, siguiendo, según puntualiza el autor, las «palabras de amor y [los] ejemplos abreviados» de los sufíes, religiosos sarracenos muy apreciados, que despiertan en el hombre un gran fervor. Eduardo Moga Ramon Llull nació en Palma de Mallorca hacia 1232, en el seno de una opulenta y linajuda familia. Fue paje de Jaime I, el conquistador de Mallorca, y senescal del hijo de este, Jaime II. Hacia 1256 se casó con Blanca Picany, que le daría dos hijos: Domingo y Magdalena. Al parecer, su matrimonio no le impidió llevar una vida disoluta, entregado a los placeres del sexo, la riña tabernaria y lacaza. En torno a 1263 se produjo su conversión, una auténtica conmoción que transformó por completo su vida y lo sumió en un estado de exaltación y entusiasmo religioso tan extremados que su esposa no dudó en nombrar ipso facto un administrador de su patrimonio, pues Ramon dejó de pertenecer para siempre al círculo de las personas comme il faut.