Cuarenta años después de Mayo del 68, el caso se reabre. El mundo ha cambiado considerablemente desde aquel año de ruptura, pero hoy el enfrentamiento continúa, y los políticos se posicionan de nuevo frente a los acontecimientos del Mayo francés, que unos tratan de desempolvar y otros prefieren enterrar. ¿Por qué atacar Mayo del 68 en el siglo XXI? ¿Por qué volver a un caso archivado en un momento en que hay asuntos más candentes, errores más recientes? Poco antes de las elecciones en Francia, en un mitin, Sarkozy exhortó a la multitud a «liquidar la herencia de Mayo del 68», y prometió «pasar página». Pero el espíritu de Mayo del 68 pervive. Y ello queda patente en este libro y en el diálogo padre hijo que da lugar a la reflexión a dos voces que recoge. André y Rápale Glucksmann, dos personalidades sólidas y libres, pertenecientes a distintas generaciones, aclaran cuál es la actualidad de Mayo del 68, «qué parte del 68 hierve, actúa y vive aún en 2008».