Quiero ir con vos a Santa Fe. Tío Rodrigo me miró, lo pensó un poco y respondió: "No sé, Pedro. Es un viaje largo y tal vez peligroso". "Pero me has llevado varias veces hasta el arroyo del Medio ¿Qué son unas cuantas leguas más? Además, el inglés y vos van a necesitar ayudantes que se ocupen de los caballos de reserva."