Rob Reiner es uno de esos directores sobre los que se podría decir que trabajan prácticamente desde el anonimato. Sobre él no se publican libros ni se encuentran grandes estudios monográficos en revistas especializadas, no se hacen promociones internacionales de sus películas ni se escriben amplios reportajes, no hay estrenos multitudinarios ni espectaculares campañas publicitarias. Y, sin embargo, en su filmografía hay varios títulos que forman parte de la cultura popular y que son fácilmente reconocibles (y recordados) por el gran público como, por ejemplo, " Cuenta conmigo " (1987), " La princesa prometida " (1987), " Misery " (1990), " Algunos hombres buenos " (1992) y, sobre todo, " Cuando Harry encontró a Sally " (1989), que está considerada como la comedia romántica contemporánea por excelencia.