Los gitanos españoles guardan en su memoria viejos cuentos olvidados desde hace tiempo. Destacan, sobre todo, los relatos épicos que nos hablan de héroes medievales como Bernardo del Carpio, Carlomagno, Roldán, Oliveros y Los Doce Pares de Francia, y es que el regusto por la épica ;en la que se confunden personajes históricos y legendarios con las valentías de míticos gitanos de otros tiempos; es una de las particularidades de esta cultura. También destacan una larga relación de cuentos maravillosos donde se impone el reino de la fantasía y muchas leyendas ;tenidas como ciertas por los gitanos; de almas en pena, aparecidos y encantamientos. Cuentos que se han ido desgranando en las noches de invierno, en la soledad más absoluta de las acampadas a la intemperie, al amor de una lumbre que calentaba sus cuerpos pero que resultaba insuficiente para templar los miedos y temores de la larga noche gitana.