La obra Democracia constitucional y opinión pública trata de ofrecer la trayectoria de la opinión pública desde la época en la que se origina su noción ideal hasta su estado presente, con las circunstancias de su transformación y, por último, con su situación actual en un Occidente mundializado de sociedades fragmentadas. En este trabajo, aparte de las lógicas reflexiones sobre la cuestión principal, se mantiene una tesis constitucional de fondo; es a saber, que, puesto que el reconocimiento político de la opinión pública es la nota estructural y estabilizadora de todas las democracias representativas, por cuanto es el elemento que asegura la continuidad entre los gobernantes y los gobernados, realizando de esta forma mediata el principio de la soberanía popular, y, en consecuencia, el ordenamiento jurídico y, en particular, la legislación, deben depender directa e indirectamente de ella, su debilitamiento, desprecio o destrucción aniquilan las posibilidades de subsistencia de los Estados liberal-democráticos en el mundo contemporáneo. Como se comprende sin dificultad, no se está solo ante un problema teórico, sino eminentemente práctico y real.