¿Qué ocurre el día en que a un niño le privan de su más querido objeto —el chupete— porque le dicen que ya es mayor? Mario llora y grita de rabia porque para él su chupete es fantástico: cuando lo lleva, se le aparecen un mar y un barco de vela, una oveja blanca comiendo hierba y una gallina roja con sus tres polluelos... Pero a partir de esa noche todo será diferente. Mario quiere a toda costa su chupete. Solo el cariño de su madre le calmará.