La fobia social es un trastorno de la conducta reconocido por la Organización Mundial de la Salud como un problema de salud pública grave. Su edad media de inicio se sitúa entre los 14 y los 16 años y se caracteriza por el miedo a la evaluación negativa que puedan realizar los demás del comportamiento propio. Interfiere de manera muy relevante en la vida de los que lo padecen y puede acarrear graves problemas, que van desde el abuso en el consumo de drogas hasta el bajo rendimiento académico, pasando por la dependencia económica permanente de la familia, el abandono de los estudios o la ocurrencia de cuadros depresivos graves y el suicidio. A pesar de esto, son muy pocos los adolescentes con fobia social que solicitan ayuda especializada, por lo que es preciso poner en marcha recursos que permitan a los profesionales tener un conocimiento preciso del problema, así como de las estrategias e instrumentos para su evaluación y tratamiento, tanto en el orden psicológico como en el farmacológico. Esta obra ofrece una respuesta a dicho reto, presentando una aproximación rigurosa al estado del conocimiento de los desarrollos teóricos y la investigación en este campo.