En esta obra se contiene un estudio bastante detallado sobre la naturaleza y el funcionamiento de la unidad económica de producción o empresa, tanto desde el lado productivo y distributivo como desde los puntos de vista organizativo y financiero. Para la realización de la función de producción y distribución que le es propia, la empresa necesita disponer de recursos financieros, que habrá de adquirir en el mercado financiero o generar internamente. La empresa es un sistema de coordinación central: una unidad de dirección o planificación. Los diferentes recursos y actividades o funciones de la empresa no pueden ser coordinados (dirigidos) sin una estructura organizativa por la que se disponga: ¿qué hacer?, ¿cómo hacerlo?, ¿quién debe hacerlo? y ¿cuándo ha de hacerse?, en las diferentes áreas o niveles de organización. La organización da vida a la empresa, pero no es por ella misma un recurso, sino causa y efecto de los servicios rendidos por los recursos materiales y humanos de que aquella dispone. Es el resultado de la función racional del empresario en su deliberado intento de adaptar medios para conseguir fines, o función de planificación, que es consustancial a todo quehacer económico-empresarial.