La pintura se hace relato histórico en este libro. Una selección de cuadros clásicos de nuestro arte es la excusa para desgranar episodios históricos de una España pretérita. De cada escena pictórica el autor extrae un relato divulgativo que tiene por objetivo final ofrecer lecciones que nos dejó nuestro pasado. Al mismo tiempo hay una reflexión del porqué de esos cuadros a través de la historia. ¿Qué razones históricas motivaron su reflejo en la pintura? ¿Por qué algunos cuadros han alcanzado la categoría de «históricos» o se convirtieron en estandarte de una época o un suceso concreto de nuestra Historia? La lección de política moderna de un cuadro religioso del siglo XV en Cataluña; las estampas de la vida de Felipe II que resumen buena parte del espíritu de su reinado; la gloria imperial entre «las lanzas» que pintó Velázquez; la sempiterna unión de política y religión en nuestra historia a través de un cuadro del dogma de la Inmaculada; un enigmático retrato de Cervantes y un enigmático soneto que lo desvela; la historia marítima de España desde el pasado colonial a los desastres bélicos; el retrato inigualable de una decadencia, tan real como fantasmagórico, a través de la familia de Carlos IV; la revolución liberal y romántica inacabada del siglo XIX con el contraste entre un fusilamiento y una lectura en el estudio de un pintor, y la microhistoria tan popular como enigmática de la pintura biográfica de la Chiquita Piconera.