El texto presta singular atención a tres materias relevantes: los sinsabores que acosaron a Benjamin en un exilio que se inició en 1933, la muerte trágica —aún hoy cargada de controversias— en Portbou en 1940, y la naturaleza de ese texto, las "Tesis sobre el concepto de la historia”, mitad llama, mitad oscuridad, al que dedicó los últimos relámpagos de su lucidez.