Este proyecto surge de la experiencia docente. Los autores conocen perfectamente cuál es la situación auténtica de los alumnos que escogen la asignatura de Religión, los problemas de la optatividad y, sobre todo, del horario. Así que los contenidos de los libros se adaptan a todas estas circunstancias. El lenguaje es narrativo, se evitan párrafos largos y oraciones demasiado complejas. Se parte de la experiencia previa de los alumnos, de lo que ellos conocen, para que el aprendizaje sea significativo. Las actividades nacen desde la experiencia, es decir, se han hecho antes con los alumnos y se sabe que responden bien a ellas, las entienden y son adecuadas a los objetivos propuestos. Los contenidos aparecen de manera no muy doctrinal, favoreciendo así la receptividad por parte del alumno y la disposición positiva para asimilarlos. Está elaborado en equipo. Supone reflexión, elaboración, crítica y reconstrucción tema por tema. Esto le da un carácter poliédrico y madurativo.