El I duque de Lerma, don Francisco de Sandoval y Rojas (1553-1625), llegó a ser el español más poderoso de su tiempo
y también la cabeza visible de una red de inmoralidad y corrupción. Valido y hombre de confianza de Felipe III, era en realidad el verdadero gobernante del reino, situación que aprovechó para enriquecerse sin límites. Nacido en una familia fiel al servicio de la Corona, pero sin apenas recursos económicos, logró amasar la mayor fortuna del momento y controlar tal cantidad de oficios, mercedes y dignidades que perdió el juicio por la codicia y la pasión del poder. Durante su gestión, el tráfico de influencias, el nepotismo y la venta de cargos públicos superaron el límite de lo tolerable. Hubo numerosas voces que se levantaron contra él, entre ellas la de la propia reina. Siempre angustiado por acumular riquezas y conseguir el perdón de Dios, el momento culminante de su bipolaridad psíquica tuvo lugar cuando pidió el capelo cardenalicio. Alfredo Alvar, especialista en la España del Siglo de Oro, lleva a cabo en este libro una brillante y minuciosa investigación que descubre aspectos inéditos de tan controvertido personaje y de su época.