La provincia de Huesca es, para muchos, sinónimo de paisaje de alta montaña. En estas tierras aragonesas tanto el alpinista como el simple senderista van a disfrutar de algunas de las más hermosas cumbres de cuantas se elevan en el sur de Europa. Pero no todas ellas están en los Pirineos y se cubren de nieve, sino que sus más bellos montes también se hallan repartidos por otras zonas de Huesca, despuntando en diez comarcas distintas: desde las áreas más norteñas y altas, a las más bajas y esteparias del valle del Ebro. Con esta guía Eduardo Viñuales y Alberto Martínez nos invitan a ascender paso a paso a toda clase de macizos montañosos, sierras, picos, tucas, tozales, peñas, vértices, cerros, puntas, muelas, sasos, ripas y cabezos. Son 200 montes y muchos más paseos o excursiones De camino a lo más alto de estas montañas nos encontraremos con glaciares, crestas rocosas, paredes, ibones y lagunas, bosques, valles, barrancos, ermitas y pueblos, zonas que recuerdan a un desierto
y con bellos entornos naturales dignos de ser visitados y recorridos.