El federalismo no es nuevo ni en nuestra historia ni en la del mundo y cuenta con una consolidada tradición a sus espaldas. Pero la reflexión sobre la vigencia del modelo federal se vuelve más perentoria que nunca en un momento en el que España afronta conflictos sobre procesos soberanistas y Europa el problema de una unidad política sólida y eficaz. Etimológicamente, el federalismo remite a la construcción política de la confianza (fides) mediante pacto (foedus) entre iguales. Su configuración como un Estado entre estados, con una soberanía descentralizada, responde a la formulación de la unidad en la diversidad cultural y nacional, fundada en identidades no excluyentes, conforme a los principios de libertad, igualdad, fraternidad y cooperación. A pesar de los diferentes modelos federales – suizo, canadiense, estadounidense, alemán, etc. –, todos ellos participan de un mismo logro: el encaje del autogobierno de las partes en un gobierno compartido por todas ellas. De la mano de la filósofa Victoria Camps y junto al politólogo Joan Botella y el economista Francesc Trillas, este libro argumenta las razones del federalismo y expone de forma sistemática su programa político y económico y su diseño institucional. Su objetivo es pensar la viabilidad del modelo federal a partir de la experiencia de varios países en sus diversos contextos políticos e históricos, desde la intuición de que es más ventajoso, frente a un mundo atomizado, un federalismo democrático que busque las unidades y complicidades, en consonancia con un mundo cada vez más global e interrelacionado.