El pensamiento de Jacques Rancière se ha convertido en los últimos años en una de las referencias centrales para el mundo del arte. Su sentido de la estética y la política es utilizado por un gran número de discursos artísticos contemporáneos, y su vocabulario es empleado constantemente por parte de críticos, comisarios, artistas, historiadores o, incluso, museólogos, hasta el punto de que, en la actualidad, sea prácticamente imposible leer un texto sobre arte contemporáneo que no aluda a términos como desacuerdo, emancipación, imagen intolerable, pensatividad, régimen estético, reparto de lo sensible, magisterio de la ignorancia, la parte de los sin parte, comunidad de iguales
Y es precisamente en ese contexto en el que un libro como el que aquí se presenta tiene sentido y pertinencia. Un libro que resiste ante la banalización y la epidemia de las palabras mágicas y que aboga por la complejidad y el análisis serio y meditado de un pensamiento, el de Rancière, que de ninguna manera puede ser reducido a las apenas tres cuatro líneas justificativas que tiene en los textos críticos. Miguel Á. Hernández Navarro (Profesor de Historia del Arte Contemporáneo en la Universidad de Murcia, escritor y crítico de arte)